miércoles, 18 de agosto de 2010

Capítulo 1: Presentimiento.

Notas de la autora: LA FOTO DEL BLOG LA HA HECHO LAAU WALKER, QUE POR CIERTO, LE HA QUEDADO DE PUTA MADRE.

__________________________________________________________________________________




-¡LUCEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!

El grito de una de sus hermanas la hizo despertarse repentinamente, impactando su cabeza en la cama que se situaba encima de ella, puesto que dormía en una litera.

-¡CAGOWENDIÓ!

Se tocó la cabeza y miró su habitación.

-Sigue todo oscuro- sonrió.-Pues ale, a dormir.

La puerta fue brutalmente abierta.

-A la mierda el dormir- Ichiko se incorporó de nuevo.

Vio cómo sus dos hermanas destruían la habitación por completo. Luce trepó por la litera colocando el pie en la cabeza de Ichiko como base para impulsarse y subir. Su otra hermana, Florette, apuntaba a Luce con….

-Flo, explícame qué cojones haces con la cuchilla de las piernas- dijo Ichiko.

-¡Me ha despertado poniendo todo su TRASERO en mi CARA!

-No niegues que te gustó…-susurró Luce.

-¡OIASHKSD!- dijo Florette.

-¡Guttenberg ajquetes!

Un silencio embargó a las tres hermanas e Ichiko solo pudo decir…

-Me voy al baño a meditar, si no vuelvo es que me he teletransportado a otro váter.
_________________________________________________________________________________________

No muy lejos de allí, en un parque para niños pequeños, tres chicos entablaban…

¿Una linda y apacible conversación?

-¡NO JODAS MOCOSO CON CANAS!- gritaba un chico de unos 18 años, de cabellos largos oscuros y ojos de un color similar.

-¡Deja de gritar BaKanda!- replicó el otro chico, de cabellos albinos y ojos grises. Tenía una extraña cicatriz roja que empezaba desde su frente y pasaba por su ojo, finalizando en la mejilla.

-¿!Qué me has llamado!?

-Chicos, creo que lo mejor es que vayamos a…

-¡TÚ CÁLLATE!

El chico pelirrojo de ojos verdes suspiró, encogiéndose de hombros sin abandonar su sonrisa.

-Aquí no hacemos nada interesante ~ - opinó.

-Yo tengo hambre…- musitó el de la cicatriz, llamado Allen.

-Y yo tengo ganas de pegarte una ostia- dijo Kanda.

Volvieron a gritarse nuevamente, y Lavi, el pelirrojo, decidió intervenir.

-¡Striiiiiiiiiike!

Consiguió llamar la atención de los dos.

-En vez de hacerte más sabio con el tiempo, te haces más gilipollas.

-Yo también tengo un cariño secreto hacia ti Yû- dijo Lavi ignorando la vena que crecía en la frente de Kanda.-El caso es que deberíamos ponernos en marcha en cuanto a nuestra misión.

-¿Teníamos una misión?- repitió Allen, rascándose la cabeza.

-¡PUES CLARO QUE TENIAMOS UNA MISIÓN!- le gritó Kanda.

-¡PERO NO ME GRITES!

-¡CHICOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOS NO PELEIS ~!

-Sigo sin entender porqué mierda estamos aquí.

De repente Lavi sacó de la nada una pizarrita y empezó a garabatear. Allen se le acercó, mirando lo que hacía.

-Mira Yû, este con pelo de rapunzel eres tú- señaló al muñequito de pelo largo.-Este tan guapo soy yo y Allen es el bajito con alas.

-Gracias por recordarme que ya no las tengo- murmuró Allen, frunciendo el ceño.-Y yo no soy bajito.

-Bueno, bajito no, solo un poco…

-Eres un tapón comparado con nosotros- dijo Kanda.

Allen se molestó y el otro sonrió. El albino se acercó a él, colocándose frente a frente.

-¡Somos de la misma altura, sino, no podría hacer esto!

Y le golpeó la frente con su propia cabeza, ocasionando dolor y enfado en Kanda.

-¡Chicos que no he terminado de decir el plan!- se quejó Lavi.

-¡A LA PUTA MIERDA EL PLAN!

Entonces el chico de cabello oscuro sacó una espada con la cual partió aquella pizarra en dos. Lavi tembló ante la furia de su compañero y Allen no paraba de carcajearse en toda su jeta. Les quedaba un largo y tortuoso camino para convivir juntos.
_________________________________________________________________________________________

Florette, Luce e Ichiko Harvenheit se trataban de tres hermanas muy peculiares. No solo en la personalidad y en sus gilipolleces sino también por el hecho de que no eran unas chicas comunes. A pesar de ser de la misma sangre, las tres eran muy distintas. Florette era una chica de 16 años, al igual que Ichiko, de pelo rosa claro y ojos azules. Luce tenía el cabello gris y ojos dorados mientras que la última, Ichiko, los tenía negros y sus ojos eran rojos. Las tres eran cazadoras de demonios. Hacía tiempo, unos demonios perversos habían matado a su familia, y ellas tres habían sido las únicas supervivientes. Su objetivo era encontrarles, haciéndose pasar por gente normal con la suerte de seguirles la pista, por desgracia hacía bastantes años que no habían conseguido ninguna pista al respecto.

-Me duele el culo y no tengo ganas de ir al instituto- dijo Luce, acostándose encima de la espalda de Florette.

Entonces, Florette cayó al suelo.

-Tengo fueño.

-¡FLOOOOOO NO SEAS VAGA!

-¡¿QUIÉN ESTÁ ENCIMA DE MI ESPALDA?!

-¡SOY LA MENOR, ES TU DEBER CUIDARME!

-¡Y UNA POLLA DE BUEY!

-CÓMEME EL ZOLOTROCO CON UN POCO DE COCO ~ - canturreaba Luce.

-Por cierto…

-Cómeme el…

-QUE TE CALLES COÑO- pidió Florette.-¿Dónde está nuestra tercer puta?

-MI NOMBRE NO ES COÑO.

Luce miró a todos lados y dijo:

-¡OSTIA, QUE NO ESTÁ!

Ichiko había seguido caminando, eso fue lo que supusieron ambas hermanas. Florette se levantó, provocando que Luce se cayera de culo. Se sacudió su uniforme y retomó el camino.

-Vamos a buscar a la guarra esa- dijo la del pelo rosa.

-Si no la encontramos, estará ya en el instituto- concluyó Luce sin ponerle importancia.-Ya le arrancaremos el pene cuando la veamos.

Entonces, mientras pasaban por un parque que siempre les cogía de camino, Luce se fijó que de él salían tres chicos. Cuando pasaron al lado de ellos, no evitó fijarse en uno en concreto, en uno de cabellos blancos y ojos grises. Florette ni siquiera se había dado cuenta, estaba muy metida en su mundo como para haber caído. Pero, aunque ella no hubiese reparado en la presencia de ninguno de los tres. Lavi sí lo hizo. Al irse las dos por su camino, Allen pasó la mano por su rostro.

-¿Lavi?

-¡ALLEEEEEEN ~!

El joven se sorprendió ante la reacción. Kanda simplemente suspiró.

-¿Pasó algo?- preguntó.-Miraste muy raro a esa chica.

-¿A cuál chica?

-A la que acaba de pasar.

-¿Acaso te gustó ~?

Allen se rindió y se limitó a dirigirse a un camino totalmente contrario a las de las jóvenes. Kanda también hizo lo mismo pero Lavi antes de irse, miró una vez más por donde pasaron ellas.

Aquellas chicas definitivamente, no eran normales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario